La familia es genial, pero cuando llega ESE momento… debemos abandonar el nido de nuestros padres.
La comida de mamá, la comodidad del hogar de nuestros padres, todo es muy bonito en la casa de ellos, pero hay indicios que nos hacen dar cuenta que ya es hora de vivir lejos de casa.
Hay ciertas situaciones que ya no toleramos y nos invitan a retirarnos e independizarnos… ¿te ha pasado? Créeme que lo próximo que harás es irte de la casa de tus padres y crear tu propio hogar.
Tu abuela te despierta a las 7 am con sus ruidos
Las escaleras, el microondas, los programas matinales o la radio... ¡Rayos! ¿Cómo pueden hacer tanto ruido? ¡Quiero dormir y despertar a la hora que YO quiera!
Compartes tu dormitorio con un hermano adolescente
¡Ops! ¿Hay algo peor? Sus hormonas, su ánimo, toooodo es molesto. Lo queremos, pero lejos de nuestro cuarto.
No poder dormir sin pijama
Es verano, hace calor, y tú no puedes dormir sin pijama porque hay un hermano en tu dormitorio. Necesitas un dormitorio para ti sola… o quizá un hogar para ti sola.
Llegas con ganas de tirarte en tu cama, pero es hora familiar
Sales del trabajo, cansada, con ganas de sacarte la ropa del trabajo y tan solo dormir. Pero… tu familia está reunida y tienes que quedarte con ellos allí. ¡Nooooo!
Tu hermano hace fiestas en tu casa y no te deja dormir
¡O-K! ¿A esta hora? Tus hermanos hacen fiestas o se reúnen con sus amigos en tu casa, sin importar que mañana las personas trabajen, tengan médico o simplemente quieran dormir. ¡Qué se vayan a otro lado!
¿Cuándo te vas a casar? ¿Cuándo vas a terminar la universidad? ¿Y el novio?
¡Basta de preguntas! Quiero seguir mi propio ritmo… ¡rayos!
Compartir la computadora (y sus peleas)
Cuando en un hogar hay solo una computadora comienzan a haber turnos. ¿Te ha sucedido? ¡Seguro que sí!, y eso haya traído más de un problema entre hermanos. Aunque sea tu propia computadora, si tu hermano la necesita, tus padres van a pedirte que se la prestes.